23 de septiembre de 2010

El secreto de James Bond

Les informo que a partr de estos días pulicaré algunos temas que ya habían salido previamente, pero que por comentarios de ustedes he decidido volever a poner, así que les recomiendo hechar un ojo a los temas en la barrera lateral por si alguno les interesa. Estos temas estarán poco tiempo, pero después permanecerán en la barra lateral.
Por Juan Carlos Pérez Vertti Rojas


Para nosotros los caballeros es muy triste aprender lo siguiente tardíamente. Ya que de saberlo desde jóvenes nos convertiría en irresistibles. Si quieres saber cuál es el secreto al que me estoy refiriendo te invito a leer atentamente la siguiente nota.
Durante los 28 días (promedio) que dura el ciclo menstrual de una mujer, sus hormonas, la talla de sus senos, su apetito sexual y su irritabilidad cambian constantemente. Los ciclos que ocurren rítmicamente cada mes son controlados por una glándula que está a bastante distancia, la pituitaria, ubicada en la base del cerebro, ¡Capici!.
He aquí una guía practica para comprender sus otras curvas: las del comportamiento.
DÍAS 7 AL 11: Se su mejor colega y ¡al ataque! Su hormona sexual FSH (Hormona Folículo Estimulante) está en el punto más alto, el estrógeno que tanto las amarga se encuentra en su nivel más bajo. Está contenta y alebrestada. Es el momento ideal para ayudarla a cometer diabluras.
DÍAS 12 AL 16: Reduce la velocidad. Cualquiera de estos días ocurre la ovulación. Un huevo hambriento de esperma anda suelto y espera ser fecundado. Si no estás listo para ser papá, no olvides tus preservativos. Todo esto se debe a la LH (Hormona Luteinizante) y a la progesterona (literalmente: “A favor de la gestación o embarazo”), quien también actúa en el pecho estimulando la producción de la leche.
DÍAS 17 AL 22: Es la mejor etapa para intercambiar opiniones y tomar decisiones con ella, sus hormonas están en equilibrio y en general cuanta con una gran estabilidad. No olvides lo más importante, está para cumplirte tus caprichos.
DÍAS 23 AL 28: Adopta un bajo perfil. Tiene el síndrome premenstrual y los niveles de progesterona han aumentado. Se sentirá nauseabunda y malhumorada. Lo bueno para ti es que sus senos crecerán una talla, lo malo es que no te dejara tocarlos.
DIA 0: B O M B A. Las hormonas sexuales femeninas han llegado a su nivel más bajo, específicamente, el descenso es abrupto y se produce la deterioración del revestimiento uterino, e inevitablemente se produce la eliminación de éste.
DIAS 1 AL 4 : Consiéntela. Ha llegado la marea roja y tu hora de trabajar. Prepárale un tecito y acompáñala mientras mira su telenovela favorita. Gana puntos solidarizándote con ella por su dolor. Y si es necesario dile que Brad Pitt es lo máximo. Algunos llaman a esta etapa: “El llanto de un útero decepcionado”.
DIAS 5 AL 6:está de un buen humor irreconocible. Los estrógenos nos favorecen ya que su paulatino aumento la vuelven una fiera. Es hora de hacer que rechinen los resortes del colchón y que los vecinos se quejen por el escándalo. ¡A comer! Te lo mereces.
Pero por si todavía no te cae el veinte, ahí te van dos consejos más: 

La belleza de una mujer no está en su ropa, su figura, ni en su peinado. La belleza de una mujer debe brotar de sus ojos, porque ellos son las ventanas hacia su alma, el lugar donde reside el amor.
La belleza de una mujer no está en sus facciones, sino que es el reflejo de la belleza verdadera de su alma. Es el cuidado amoroso que da, la pasión que ella muestra. La belleza de una mujer solamente se desarrolla con el paso del tiempo.

¿Crees en el Karma?

Por Juan Carlos Pérez Vertti Rojas
¿Cuántas vidas has tenido?


Inicialmente solo te acordarás de la que tienes actualmente, pero si echas una mirada a la página: http://www.tuvidapasada.es/? descubrirás que has tenido una infinidad de ellas.
Es interesante observar cómo a pesar de estar en el siglo XXI, ideas que se originaron en el siglo IV a. n. e., todavía rijan en nuestros pensamientos. Desde el punto de vista económico es un gran negocio tener crédulos en la materia, quienes pagan miles de pesos por un viaje astral (forma en la que se puede viajar en el tiempo y las dimensiones para conocer tus vidas anteriores); desde el punto de vista religioso, es una buena manera de mantener las creencias en una entidad suprema y darle sustento a que existen seres del mas allá que dictan nuestro destino; y desde el punto de vista social es una buena manera de intentar controlar el delito, porque lo que hagas en contra de los demás te será revertido (aunque en ese sentido ya nadie se la cree).
La metempsicosis o transmigración es la creencia de que el cuerpo es sólo un receptáculo momentáneo de lo que verdaderamente conforma al ser, que es el espíritu. Personajes muy importantes han dependido de este dogma y han dedicado su vida a completar las metas de sus vidas anteriores. Las personas que no creen en el alma, pero sí en la reencarnación le llaman Metensomatosis o Palingenesia, quienes creen que existe un tribunal de justicia fuera de esta dimensión que te obliga a cumplir penitencias por equívocos de las vidas pasadas, a lo cual le llaman “Karma”, es decir lo malo; en el otro lado de la balanza estaría el “Dharma”, esto es, lo bueno. La ley de acción y consecuencia se mantiene hasta que logras equilibrar tu balanza. El palacio de justicia se encuentra en la quinta dimensión de la naturaleza gobernado por Anubis y 42 jueces y podrás visitarlo a través de los viajes astrales.
Pero regresando al tema, la idea se origina por los pensamientos aristotélicos, que suponían que la naturaleza estaba organizada de lo más simple a lo más complejo: primero los cuatro elementos (aire, viento, fuego y agua), después venían las formas de vida más simples y luego las más complejas. Los seres humanos eran distintos y superiores a todos los animales porque tenían la capacidad de pensar. Los planteamientos de Aristóteles dieron lugar a dos ideas: una fue la noción de que los seres vivientes se dividían en "especies" y la otra fue la teoría de la "gran cadena del ser o scala naturae". En la Biblia se retoma esta idea y se manifiesta como La Escalera de Jacob, en la que las formas animales aparecen como resultado de la degradación progresiva a partir del hombre, según la cual, todos los organismos pueden ser ordenados de manera lineal, continua y progresiva, comenzando por el más simple hasta alcanzar el más complejo, que normalmente se identifica con el hombre, es decir, en entidades ordenadas jerárquicamente (esto es, por relaciones asimétricas y transitivas) según sus grados de perfección.
Desde la Edad Media (siglos IV al XV), los teólogos católicos han usado las ideas de Aristóteles para establecer que todas las "especies" de la naturaleza formaban parte de una infinita "cadena" de la existencia, en la cual los seres vivos se relacionaban unos con otros según un orden continuo que iba de lo simple a lo complejo. Para el pensamiento medieval, esta "cadena de especies" había sido creada por Dios desde el origen de los tiempos y no había cambiado desde entonces, concepto que se conoce con el nombre de “Fijismo”.
En la época contemporánea, el proyecto metafísico de una scala naturae se ha renovado incorporando el punto de vista evolucionista: según esta versión, los seres del mundo se hallarían en una escala evolutiva de niveles de complejidad que va desde aquellas entidades más simples (los quarks o los átomos) hasta los seres que han adquirido el mayor grado de organización (los animales superiores, el hombre). Esta doctrina es incompatible con el materialismo filosófico, al recurrir al monismo del orden y a la idea de emergencia creadora.
Esta barbaridad de incorporar el punto de vista evolutivo a una idea tan retrógrada obedece a la intervención de la iglesia católica a través de uno de sus mas brillantes investigadores, Teilhard de Chardin, quien arguye, no sólo la vida, sino la materia y el pensamiento están también involucrados en el proceso de la evolución. De ahí que es necesario atribuirle a dicho proceso un sentido. El sentido de la evolución, que involucra tanto la materia, como la vida y el pensamiento (o el espíritu), está comprendido en un principio descriptivo de la mayor generalidad: la tendencia hacia el logro de mayores niveles de complejidad y, simultáneamente, al logro de mayores niveles de conciencia.
Los asiáticos también se han inspirado en esta idea y han desarrollado su propia concepción esotérica referente a una cadena transformista, sólo que en ella se cambia de cuerpo y de época. Con el paso del tiempo tienes que equilibrar el peso de tus vidas para alcanzar el Om (lo más cercano a la perfección, o al paraíso, versión budista). A todo lo anterior sólo me surge una pregunta: ¿Durante cuánto tiempo más estaremos sometidos a las ideas que evitan que progresemos intelectualmente como humanos?
Sin embargo, no todo es karma, perdón, quise decir: no todo es tan malo. Gracias a la contribución de Chardin, el pensamiento evolutivo (aunque fuera el darwiniano) ha podido ser transmitido a nivel social. Esto es, la iglesia dejó de ser tan ortodoxa y aceptó el hecho de la evolución, pero lo mejor, es que permitió que se hablara de ella en los centros educativos, sin que pareciera contraria a los preceptos bíblicos porque acepta el progreso de los seres vivos, pero sin quitar el diseño inteligente de un ser creador y regulador, la superconciencia o el “omega” como Chardin lo definió. Es nuestro turno aprovechar esta apertura y cuestionarnos más sobre el progreso del pensamiento evolutivo en teorías más serias como el Neodarwinismo, los Equilibrios intermitentes o la Evo-devo.
Para cerrar es inevitable hablar de los Beatles, para John Lennon esto significaba el Karma:

Karma instantáneo

El Karma instantáneo va a atraparte golpeándote directo en la cabeza
Tienes que concentrarte, muy pronto estarás muerto.
¿Qué rayos estás pensando?
Riéndote en frente de la cara del amor
¿De qué se trata tu vida en la Tierra?
Te toca a ti, sí a ti
El Karma instantáneo va a atraparte golpeándote directo en la cara
Mas te vale que te concentres cariño en unirte a la raza humana
¿Cómo quieres ser idóneo si te la pasas riéndote de tontos como yo?
¿Quién rayos crees que eres tu?
¿Súperestrella? Está bien, lo eres.
Todos brillaremos como la Luna las estrellas y el Sol
Todos brillaremos
El Karma instantáneo va a atraparte golpeándote directo para que tambalees
Ve reconociendo a tus hermanos en todo aquel que conozcas
¿Por qué rayos estamos aquí?
Seguramente no para vivir entre el miedo y el dolor
¿Por qué estas en la Tierra si puedes estar en todas partes?
Por eso ahora todos brillamos
Como la luna las estrellas y el sol
Sí todos brillamos ya
Vamos ya una y otra vez, una y otra vez

12 de septiembre de 2010

¿En verdad eres una persona que ama?

Por Juan Carlos Pérez Vertti Rojas

El amor es real, dice John Lennon en una maravillosa canción, pero ¿qué es en realidad el amor?
Podemos dar cientos de definiciones, algunas muy cursis, otras interesantes, pero todas ellas plagadas de vacíos que nos hacen sentirlas incompletas o que no satisfacen nuestros propósitos. Por ejemplo, para algunos investigadores existen cuatro tipos de amor: el Fraternal, que se da a los hermanos; el Filial, que es el que se brinda a los amigos; el Agape, que es el que los padres dan a los hijos y que implica un gran desprendimiento y en ocasiones es doloroso; y el Eros, el cual se comparte con la pareja y es, tal vez, al que más se han referido cuando se habló de fidelidad. Para otros investigadores están otros más como el amor a si mismo, llamado Narcisista; o el Platónico, aquel en el que se idealiza a una pareja y que en nuestros pininos amorosos es el que creemos que será el único y verdadero, aunque el destino en forma muy amena (o cruel), se encarga de mostrarnos lo equivocados que estamos.
La vida nos ha enseñado a ser muy comodinos y a adoptar los significados de las palabras a nuestra conveniencia, porque así hacemos las cosas a nuestro modo y así evitamos explicaciones largas o justificaciones necesarias.
Cuando a una pareja le decimos “Te amo” ¿Qué le estamos diciendo en realidad? ¿Qué tan válidas son esas palabras? Antes de seguir leyendo te reto a que definas que es el amor y por qué sientes amor por una determinada persona.
En esta ocasión trataré de basar el concepto del amor en la posición biológica, acorde a mi profesión. En biología podemos analizar el amor desde la perspectiva molecular, fisiológica, hasta la etológica, pasando por los instintos animales que nos caracterizan y sin dejar de lado los aspectos psicológicos y sociales.
El médico Justo Ulloa, señaló en la década de los sesenta del siglo pasado, la primera interpretación bioquímica del amor, diciendo que éste era una intoxicación de hormonas sexuales y el resultado de específicos reflejos condicionados. De acuerdo con estudios más recientes, el amor se inicia con la vista y el olfato para procesarse en la corteza cerebral, a través de las neuronas de nuestro cuerpo y de allí al sistema endocrino. Cuando encontramos a la persona deseada se dispara la señal de alarma, nuestro organismo entra entonces en ebullición. A través del sistema nervioso el hipotálamo envía mensajes a las diferentes glándulas del cuerpo ordenando a las glándulas suprarrenales que aumenten inmediatamente la producción de adrenalina y noradrenalina (neurotransmisores que comunican entre sí a las células nerviosas). El catalizador de esta vivencia tan maravillosa es un compuesto orgánico conocido como feniletilamina, que produce la secreción de otros compuestos, la norepinefrina y la oxitocina que estimulan el deseo sexual, especializados en provocar determinados efectos que forman parte de los síntomas del enamoramiento. La dopamina es un neurotransmisor que refuerza la capacidad del deseo y de repetir comportamientos que proporcionan placer.
La oxitocina, además, es la hormona que ayuda a forjar lazos permanentes entre amantes, además de su importancia en la obtención de altos niveles de bienestar, como en el orgasmo. Esta sustancia es la responsable de que exista compromiso entre las parejas, es, por así decirlo, la que nos indica que en verdad estamos enamorados de esa persona. Si la oxitocina no aparece, podemos sentir mucha emoción por una pareja y creer que estamos enamorados porque norepinefrina y la dopamina están presentes, pero cuando los niveles bajan se acaba el encanto. Puede haber refuerzos externos como las feromonas, el estímulo visual o el táctil que nos hagan creer que vivimos una gran relación, pero sin la presencia de la oxitocina el sentimiento se vuelve muy volátil.
No hay duda: el amor es una enfermedad, lleno de pensamientos obsesivos y su propio ámbito de acción. Los padecimientos y goces del amor se esconden en lo que llamamos sistema nervioso autónomo. En él todo es impulso y oleaje químico. Aquí se asientan el miedo, el orgullo, los celos, el ardor y, por supuesto, el enamoramiento. A través de nervios, los impulsos se transmiten a todos los capilares, folículos pilosos, las glándulas sudoríparas, el músculo intestinal, las glándulas lacrimales, la vejiga y los genitales, es decir, el organismo entero está sometido al bombardeo químico. Aquí no manda el intelecto ni la fuerza de voluntad. Es el reino del siento-luego-existo, de la carne, las atracciones y repulsiones primarias..., el territorio donde la razón es una intrusa.
Sus efectos se hacen notar al instante:
• El corazón late más deprisa (130 pulsaciones por minuto).
• La presión arterial sistólica (lo que conocemos como máxima) sube.
• El timo libera más timina que nos hace sentir bien (casi como si flotáramos) y de buen humor
• Se liberan grasas y azúcares para aumentar la capacidad muscular.
• Se generan más glóbulos rojos a fin de mejorar el transporte de oxígeno por la corriente sanguínea.
Todo un rollo fisiológico que nos deja impunes y a merced de nuestros instintos a gran escala (y es aquí donde pregunto: ¿dónde está la diferencia entre el humano y los demás animales?), y así es como perdemos la cabeza, vemos el mundo de color de rosa y nos sentimos flotando.
Este mar de químicos perdura de 2 a 3 años, incluso a veces más, pero al final la atracción bioquímica decae. La fase de atracción no dura para siempre. Con el tiempo el organismo se va haciendo resistente a los efectos de estas sustancias y toda la locura de la pasión se desvanece gradualmente, la fase de atracción no dura para siempre y comienza entonces una segunda fase que podemos denominar de pertenencia, dando paso a un amor menos desenfrenado, y por así decirlo más racional. La pareja, entonces, se encuentra ante una disyuntiva que debe resolver justamente en pareja: separarse o habituarse a manifestaciones más tibias de amor (compañerismo, afecto y tolerancia). Se trata de un sentimiento de seguridad, comodidad y paz. En este caso son las endorfinas las que confieren la sensación común de seguridad comenzando una nueva etapa y en mi particular punto de vista, la mejor, la del amor amistoso o la del amor consciente. Pero si se decide la separación, se sufre, porque dejamos de recibir la dosis diaria de narcóticos.
Sin embargo parece ser que tienen mayor poder estimulante los sentimientos y las emociones que las simples sustancias químicas. Por ejemplo, en un estudio alemán se analizó las consecuencias del beso matutino, ése que se dan las parejas al despedirse cuando se van a sus respectivas actividades. Los hombres que besan a sus chicas por la mañana se enferman menos, tienen menos accidentes de tráfico, ganan de un 20% a un 30% más y viven unos años más (lo cual no significa que hay que besar a muchas para multiplicar estos beneficios).
Lo que trato de decir es que metabólicamente y fisiológicamente hay explicaciones para el amor, pero son también igual de importantes los significados que le damos a los estímulos, a través de una base cultural y social.
Todavía tenemos mucha tela de donde cortar para comprender el amor. El amor como exponente de la selección sexual, en el enfoque evolucionista, y como objeto implícito de la sociología, sin embargo considero que por ahora es suficiente dejarlo hasta aquí, porque considero que ya te habrás percatado que definir los sentimientos y sobre todo definir si en este momento eres una persona enamorada o definir si alguna vez has estado enamorado te será más complicado. Mejor disfruta de tu romance, que no es lo mismo que ser una persona enamorada.